"Entre
lo histórico y lo actual"
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"La primera vez que vi a Tilo,
fue ahí. La última vez, también.
Entre esos dos momentos, solo quedó el vacío
de su ausencia y la certeza de que algunas historias
nunca cierran del todo".
Donde todo comenzó

Una infancia marcada
por un encuentro. Un periodista desaparecido en la dictadura.
Un relato que une el origen y el destino de una vocación.
A 50 metros de su imprenta y frente a la comisaría
que aún no existía, la historia de Tilo
y la mía quedaron entrelazadas para siempre.
Todo estaba ahí, conectado: el inicio, el desarrollo
y el final de una historia que, de alguna forma, también
es la mía.
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24
de marzo de 2025

Fuente del contenido |
@jorgecarusso
para @escobarsite
|
Cuando tenía 12 años, por
una travesura infantil, mi padre decidió que mi
castigo sería acompañarlo a la inauguración
de un comercio. Era una importante mueblería frente
al terreno donde años después se construiría
la comisaría, en un barrio que no terminaba de
formarse. Entre la gente reunida, vi a un hombre alto,
de caminar rígido, con la mano izquierda siempre
en el bolsillo y una libreta en la derecha.
Me llamó la atención su
porte, su gesto serio y su andar extraño. Parecía
ausente, observador, distante.
"¿Quién es ese hombre?",
le pregunté a mi padre. Sin darle mayor importancia,
me respondió: "Un periodista".
¿Un periodista? Poco tiempo después
mi maestro, como actividad didáctica, nos mandó
a recortar diarios
y entendí.
Aquel hombre era Tilo. No lo sabía
entonces, pero ese encuentro, esa simple observación
de un niño curioso, sería el inicio de una
historia marcada por la admiración, el destino
y la tragedia.
Muchos años después, en
otro marzo, ya como periodista, la historia nos volvió
a cruzar en el mismo lugar, pero en circunstancias muy
distintas. El 24 de marzo de 1976, a la medianoche, una
maquinaria precisa y despiadada se puso en marcha en todo
el país. Listas en mano, militares y fuerzas de
seguridad comenzaron a buscar a aquellos que incomodaban.
Yo pasé la noche fuera de Escobar.
Cuando regresé, temprano en la mañana, tuve
que atravesar varios controles militares hasta llegar
a mi casa. Apenas crucé la puerta, mi madre me
advirtió que un Jeep con soldados había
estado buscándome. Me dejaron un mensaje claro:
debía presentarme al día siguiente con todos
mis escritos.
Esa misma noche, a solo 50 metros de la
comisaría donde lo había visto por primera
vez, irrumpieron en la imprenta de Tilo. Él logró
escapar por los fondos, pero en la huida perdió
su brazo ortopédico. Herido, llegó como
pudo hasta la casa de unos amigos en Loma Verde. Allí
le insistieron en que se ocultara, que desapareciera.
Pero Tilo decidió entregarse. Creía, ingenuamente,
que si se presentaba por su cuenta y aclaraba su situación,
no le pasaría nada. Quería "blanquear"
lo inevitable.
El 25 de marzo, a primera hora, llegué
a la comisaría con una carpeta bajo el brazo, cumpliendo
con la citación que me habían hecho los
militares. Lo vi sentado en un banco, junto al vidrio
del patio. Me miró y, con una leve sonrisa, me
dijo: "Hola, pibe".
Esperamos. Nos llamaron. Entramos por
separado.
Yo salí. Él nunca más.
Nunca más nadie lo vio. Nunca más
nadie supo de él.
Tilo desapareció como tantos otros.
Pero su presencia quedó marcada en mi memoria,
en mi historia. Y ahora que lo pienso, su sombra y su
destino terminaron de forjar mi camino. No solo lo vi
por última vez en el mismo lugar donde lo vi por
primera vez. Su imprenta estaba a 50 metros de aquella
comisaría. Donde generosamente me ofrecían
sus instalaciones: "Dale a este pibe todo lo que
necesite", le dijo a Federico, su hermano. De hecho,
fue así. Por años Federico, me siguió
imprimiendo el periódico después de su desaparición.
Todo estaba ahí, todo conectado:
el inicio, el desarrollo y el final de una historia que,
de alguna forma, también es la mía.
Tal vez, sin saberlo, esa noche de mi
infancia, cuando le pregunté a mi padre quién
era aquel hombre con la libreta, estaba preguntando por
mi propio futuro. Tal vez ahí, en esa respuesta
breve y sin pretensiones, se selló mi destino:
"Un periodista".
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